La prostitución de travestis es algo común y es fácil acceder a travestis guapísimas en Madrid o Barcelona

Sexo con travestis

Es obvio, que la sociedad evoluciona, el cambio social es inevitable, es un proceso de transformación en el que influyen diversos factores. Los modelos tradicionales y los estereotipos, son relevados por nuevas costumbres y otras tendencias, así conductas que siempre habían permanecido ocultas cada vez son más evidentes.

Existe una realidad en las relaciones, y es que algunos hombres se sienten atraídos por travestis. La mayoría de estos hombres tienen pareja o bien están casados, además muchos de ellos se definen como de tendencia heterosexual y algunos llegan a enamorarse de la travesti.
Hay unas normas sociales, ( a veces no escritas en ningún lugar ) pero que más o menos todos conocemos, y por lo general esta, diferencia entre dos tipos de género basado en lo que se entiende como “ natural “, que procede así de la naturaleza de nuestros cuerpos.

La naturaleza, diferencia entre los machos y las hembras, pero el ser humano es más complejo y por lo tanto el abanico se amplía y se puede llegar a diferenciar entre sexos y sexualidades, más haya de lo que biológicamente está establecido.

Podemos así hablar de un sexo biológico: varón o mujer, o intersexual ( cuando coexisten características de ambos ) y también de un sexo psicológico o también conocido como identidad de género, en el que encontramos el género masculino, el femenino y el transgénero, en el que hayamos a las travestis y transexuales.

Hablamos también de un deseo sexual, el cual puede ser: heterosexual ( inclinación sexual hacia el otro sexo ) o bien homosexual ( inclinación sexual hacia el mismo sexo ), o bisexual ( tendencia sexual hacia ambos sexos ).

Debemos aclarar que un varón homosexual que se viste de mujer no es una transexual o travesti, pues una trans se siente como una mujer sin negar su origen en el sexo opuesto. Hay dos casos diferenciados, el de la travesti, ( que mantiene los genitales masculinos y no se acompleja por ello; y el caso de la transexual, la cual necesita someterse a una operación para así adecuar su sentimiento y sensación de ser mujer con respecto a su cuerpo físico.

Ateniéndonos a las diferencias mencionadas entre el sexo, el género y el deseo, las posibilidades son varias, así pues una trans puede desear tener relaciones tanto con un hombre como con una mujer, o bien un heterosexual puede desear a una mujer biológica o a una mujer travesti o transexual.

Quienes buscan travestis, pueden estar buscando a estas o bien para tener sexo o bien hay quienes se enamoran y forman una pareja estable. A pesar de los avances en materia social a los que hicimos referencia anteriormente, la creencia popular es de que un hombre que busca transexuales o travestis es un homosexual, que no quiere reconocer su condición sexual, y esto no es así.

Este hombre es varón, o sea con una identidad de género masculino, es heterosexual con deseos de una mujer, pero le atrae las trans. Este tipo de hombres heterosexuales, se sienten atraídos por un cuerpo femenino, les gusta las formas curvilíneas y la sensualidad de la mujer. Aunque pueda parecer algo paradójico, rechazan cualquier signo de virilidad en el comportamiento e incluso en el físico, sin embargo, sienten atracción por los genitales masculinos, les puede disgustar incluso el timbre de voz grave. Algunos prefieren a las transexuales operadas y otros las travestis con un cuerpo readecuado pero si operación de cambio de sexo.
Son muchas las relaciones entre hombre y travesti, en la que el hombre ejerce un rol más pasivo o bien se intercambian roles, siendo una práctica exclusiva con travestis, pues no se puede llevar a cabo con una mujer.

En el mercado encontramos oferta sexual de mujeres transgénero, algo que evidencia que hay demanda, la prostitución de travestis es algo común y es fácil acceder a travestis guapísimas en Madrid o Barcelona, unas con el físico más femenizado y otras no tanto, pero también esto influye en las tarifas a las que ofrecen sus servicios, así podemos encontrar travestis baratas en Madrid, travestis espectaculares a precio low cost. Es algo sencillo, además es un perfil de demandante universal, cualquier raza o clase social demanda estos servicios, basta con mirar prensa para observar anuncios en el que el termino “ shemales “ ( travesti en inglés ) aparece, y encontramos reclamos como: “ Shemales baratas y muy putas en Barcelona”.

Estos hombres disfrutan de estas relaciones, no lo hacen como algo excepcional o un mero juego, encuentran la relación mucho más excitante que con sus propias mujeres, sin embargo les cuesta reconocerlo ante los demás. En el momento que obtienen un elevado placer que les motiva a repetir, es cuando suelen plantearse la duda de con quien tiene que mantener relaciones, si con su novia mujer o con una “ chica trans”.

Los hombres que se enamoran de mujeres trans, tienen ante si, un importante desafío, muchos deben enmascarar o esconder una relación, que a menudo genera incomprensión, rechazo e incluso burla, y solo unos pocos valientes se deciden.

Hombres de tendencia heterosexual, que conviven en pareja o que están casados, escondes sus verdaderos gustos por las travestis, pues sería de difícil comprensión para su pareja mujer, la aceptación de dichos deseos. Excepcionalmente, alguna mujer, de mentalidad “ muy abierta”, pueden aceptar que su pareja sienta atracción o interés por una trans, admitiendo la incluso la necesidad de su pareja, por lo que se suele fantasear y utilizar dildos ( consolador ) en las relaciones sexuales, ella se ata a la cintura un pene artificial y simula tener un miembro masculino.

Quienes desean una trans, pero están en pareja con una mujer conviven con una situación de angustia, pues deben ocultar sus verdaderos anhelos, pero se puede observar en ellos una cierta conducta sospechosa, como realizar salidas nocturnas con frecuencia, usar desmedidamente el chat, o visualizar en la red páginas de travestis, incluso se puede evidenciar una disminución del deseo sexual con la pareja. Es un hombre que tiene que vivir y debe cumplir unas reglas impuestas socialmente e incluso religiosamente, que no permiten su autentica expresión.
En el terreno de la homosexualidad se ha alcanzado una mejora notable de la aceptación por parte de la sociedad, quizá ahora se pueda conseguir una mejora de la aceptación, para las personas transgénero y quienes se enamoran de ellas.